Los niños y niñas también tienen derechos, independientemente de las alternativas de vida y de pareja que sus padres o madres hayan decidido construir. Esto supone el derecho a que sus padres o madres sean reconocidos y reconocidas como tal, incluso ante cualquier autoridad o instancia gubernamental.
Una praxis revolucionaria, consistente y consecuente debe apuntar a desmontar todos aquellos prejuicios e intolerancias que siguen sustentando el desconocimiento de los derechos de los humanos y las humanas. Es necesario subvertir las estructuras de discriminación en todas las instancias, incluyendo al Estado, para seguir construyendo la sociedad libre, justa, inclusiva e igualitaria que en Venezuela nos dimos como mandato hace ya quince años, por la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Por todo esto, desde el Colectivo 4-F apoyamos la lucha de Giniveth Soto Quintana y Migdely Miranda por su derecho a ser reconocidas como una pareja con plenos derechos, y como madres (ambas) del hijo que hoy forma parte de su proyecto familiar y de vida compartido.
Indeclinablemente revolucionarios y revolucionarias,
Colectivo 4-F
Bolivarianos y Bolivarianas en el Sur
Declaración del Colectivo 4 de Febrero en defensa de los derechos a ser Madres y la legalización del Matrimonio Igualitario en Venezuela, entregado a la Embajada de Venezuela en Argentina.
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